lunes, 17 de diciembre de 2007

Una neura

Hace tiempo aprendí que nada es para siempre. Que la vida son ciclos. Que lo que hoy sirve, mañana no. Partiendo de ahí, que no es poco, lo que venga es un misterio. Un regalo que incluso a veces , hasta llega a ser del agrado de uno.

Al cabo del tiempo aprendí, que lo dificil es no dejar pasar el momento para poder vivir cada cosa en el ciclo que le corresponde.

Pasa el tiempo y sigo aprendiendo........

El tiempo sigue pasando............y siento que cada vez sé menos.

¡¡¡Sonríe..!!!....es más barato que una bombilla, y alumbra mucho más...!!!

sábado, 15 de diciembre de 2007

Clowns


Siempre me han enternecido los clowns, esos tipos tristes que hacen reir a los demás. Y me encanta la palabra cómico, en su sentido clásico, en aquel de finales del XIX, y principios del XX, aquel al que cantaba Víctor Manuel ( cómicos, son adorados, son calumniados como dioses de barro, duermen vestidos, viven desnudos, beben la vida a tragos... ).

Me cuentan que hay personas que se ríen muchísimo de mí a mis espaldas. Sólo tengo una cosa que decirles: me congratulo.
La risa es una terapia excelente, libera endorfinas, y junto con el ejercicio físico y una sexualidad saludable es lo mejor que hay para mantenerse bien. De hecho, yo soy la primera que me río muchísimo y con mucha frecuencia de mí misma. Y pobre de aquel que no sea capaz de ello, lástima me da quien no sea capaz de reirse, tal y como está el mundo,aunque sea un poquito, de sí mismo.

Eso sí, quizás esas personas, de las que no me dan el nombre, ignoran que yo soy una gran partidaria de reirme de mí misma. Quiero atribuir a ese desconocimiento el que no se rían de mí conmigo y en mi presencia, y no a mala fe.
Los y las invito a todos desde ahora mismo a hacerlo. No cabe duda de que soy una auténtica histrióna, un poco ciclotímica, en definitiva, una persona ideal de la que reirse, junto con el típico tonto del pueblo, que a ratos dudo si no lo seré también.

Sed conscientes de que a mí me encanta reirme de mí mismo, y no seáis egoistas, reiros de mí conmigo y nos lo pasamos bien todos.
¡ No dejéis de reir !

Eso sí, una cosa es reiros de mí y otra de lo que con mis ridículas formas traslado.
Porque este ridículo clown es aún un clown con ilusiones de que este mundo podemos mejorarlo entre todos...

¡ Sed felices !